Y sí, estamos en el ecuador de esta semanita intensa en Cannes.
La jornada de hoy comenzó a las 6:00 h. de la mañana para conseguir una de las sesiones más esperadas de todo el Festival: estamos hablando de Melachonlia, de Lars Von Trier.
Y sí, las conseguimos.
La sesión debería haber comenzado a las 8:30, pero como había muchísima gente (Sobre todo prensa), habilitaron otra sala para la gente que quedaba. Ésta es la Sala Soixantieme.
Sinopsis “Melancholia”: la película cuenta la historia de Justine (Kirsten Dunst), una joven guapa, inteligente y con un buen empleo, que va a casarse con Michael (Alexander Skargard). Su hermana Claire (Charlotte Rampling) le organiza una gran boda en una lujosa mansión de campo. Todo empieza bien... pero a Justine le sucede algo extraño que perciben todos los invitados a la fuesta, incluido su marido. La boda acaba mal y a partir de ahí, la historia tomará un rumbo diferente (que sorprenderá a todos) en cuanto al estado emocional de Justine.
Desde nuestro punto de vista: la película posee una gran calidad técnica, se mire por donde se mire, y posee las acostumbradas formas de dirección de Lars Von Trier. Hay una muy buen dirección de actores, pues el director ha sabido explotar el lado más oscuro de cada uno de los personajes. Es muy interesante ver a actores como Kirsten Dunst, Keifer Sutherland, etc., juntos en la gran pantalla, ya que cada uno ha trabajado en papeles muy diferentes. Otra de los elementos interesantes a destacar es la gran fotografía que posee el film, pero a pesar de todas estas características positivas, hay que reconocer que la “razón” de la película se vislumbra muy avanzada ya, hacia casi la mitad de la película (y dura 2 horas), aunque puede que sea una de las características del cine de Lars Von Trier.
Salimos a las 11 y cuarto de la mañana, y a la salida de la sala Soixantieme pudimos contemplar las huellas de las manos que había alrededor del Palais, en un homenaje a los artistas que han pasado por ahí (similar al Paseo de la Fama).
Después nos fuimos al McDonald a comer y a aprovechar su WI-FI, que es mejor que el nuestro del hotel..., de ahí nos fuimos a dar un paseo por la calle “Preciados” de Cannes hasta la FNAC, que es igual que las de Madrid.
Después decidimos ir al Palais para ver una película, pero en el tramo de la FNAC al Palais, Rocio tuvo un pequeño accidente al tropezar con unas vallas que cubrían una obra en una alcantarilla.
*Aclaración de Rocío: la calle era muy estrecha, de ahí que me diese.
Ya en el Palais estuvimos esperando otras dos horas para entrar a ver la película rumana Loverboy, de Catalin Mitulescu.
Sinopsis: la historia se centra en la vida de Luca, que es un joven de 20 años que se dedica a inducir a chicas jóvenes a la prostitución. Hasta que aparece Veli, una joven guapa y virgen, de la cuál se enamora.
Desde nuestro punto de vista: es una película que posee unas buenas localizaciones, y alguno de los actores son bastante creíbles. A pesar de que la idea es buena, el guión desciende en interés en algunos tramos debido, quizás, a la necesidad de acortar o excluir ciertas escenas que parecen similares unas con otras.
A continuación nos dirigimos a la última película del día en el Thèátre La Licorne, llamada Hors Satan, de Bruno Dumont.
Sinopsis: la película cuenta la historia del diablo personificado en un hombre. Este diablo vive temporalmente en un pequeño pueblo europeo, en el cuál mantiene una relación de amistad con una joven gótica del lugar. La relación entre ambos es simple y tiene el objetivo de hacerse compañía el uno al otro. Durante la estancia de este diablo en el pueblo, se acontecen una serie de catástrofes y asesinatos.
Desde nuestro punto de vista: la película no tiene un buen guión estructurado, aunque la idea de partida es interesante. Además los planos son excesivamente largos, sobrando así mucho minutos de metraje y además hay eternos planos generales, que podrían ser más específicos.
Finalizamos el día, con una nota de: 7'5 (debido a las dos últimas películas del día, que han fallado)
Nos vemos,
Rocio M. y Nuria M.
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